top of page

Futura Light es una fuente inspirada en elementos del diseño Bauhaus. Destaca tus palabras y es ideal para títulos, banners, logos y más.

Foto del escritorRomán Salvador Sánchez Marmolejo

Juventudes defensoras de Derechos Humanos, la lucha permanente contra el adultocentrismo.

Actualizado: 4 abr 2023


Recién fue el Día de la Juventud, y en esa tesitura escuchando las experiencias de jóvenes defensores de Derechos Humanos me llevaron a encontrar en el adultocentrismo la barrera más común del activismo juvenil. 


La defensa de Derechos Humanos es compleja de entender, porque si bien hay personas que inician en el activismo al ser víctimas o vivir en un entorno de violaciones a DDHH, también hay personas que renuncian a sus privilegios y con valentía defienden causas que parecieran ajenas. 


A este acto de desinterés propio, donde se prioriza el bienestar de la colectividad, sumemosle que la defensa de DDHH, es sinónimo de vivir en una constante pugna cargada de decepciones que eventualmente llevan a victorias.


El factor juventud en esta lucha es una enorme virtud, y la rebeldía, que en ocasiones se utiliza de forma denostativa, en DDHH es un halago, un impulso que históricamente ha sido el factor de cambio en las luchas sociales; la rebeldía es el hambre de cambio, y naturalmente la reacción ante las injusticias. 


Esta rebeldía enérgica de las juventudes es el alma del activismo, y por ende, la principal generadora de incomodidades; en este supuesto entra el adultocentrismo como “argumento” perfecto, que utiliza los prejuicios y estereotipos de edad para demeritar y no enfrentar el progreso en la protección de DDHH.


En ese sentido, una herramienta poderosa de las juventudes es el cuestionar, cuando las luchas son subestimadas cuestionar empodera a la colectividad. Y a pesar de que la empatía como término está sobreutilizado y la indiferencia está normalizada, el apostar a visibilizar vulneraciones a DDHH siempre suma voluntades. 


Y considero qué hay que tener claro que los años de edad nunca van a ser requisito para desarrollar sensibilidad social, y la gratificación vendrá cuando lo que ahora es lucha en unos años sea parte de la cotidianidad.



 


Román Salvador Sánchez Marmolejo es abogado, docente, investigador y consultor. Es licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Nayarit y realizó el Master en Gobernanza y Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Madrid.


Cuenta con diversos diplomados, cursos y talleres en materia de comunicación gubernamental, innovación pública y derechos humanos destacando su participación en el simposio de Política Pública y Administración que organiza el IAP de la UAM en la Universidad de Harvard.


Contacto:

Comments


Publicar: Blog2_Post
bottom of page