“Es la historia el más grande ejemplo de la vida humana, que se instituye con la experiencia y se corrige con el ejemplo” - Jacques Bossuet
Esta frase demuestra que la historia no solo está para ser impresa en un libro, sino que está para ser vivida y reflexionada, para ser entendida y aplicada a la actualidad. Comparto la idea de no mirar atrás y de seguir adelante, pero no podemos dejar pasar un acontecimiento tan significativo para todo individuo que se considere mexicano.
El objetivo de este ensayo no es defender tal o cual bando porque un sin fin de errores fueron cometidos y, como lo mencionaré más adelante, caeríamos en el cuento del héroe y del villano. Prefiero centrarme en la idea de, al conocer a fondo este increíble choque de mundos, entenderemos que, a pesar, y no por tal quitarle su peso, de ser un suceso de mera esclavitud, hay aspectos que se rescatan, siendo dignos de discusión.
Considero que el mero acto de la discusión, con respeto, es una actividad que hace falta practicar pues es solamente con la comunicación que podemos entendernos. Algún hombre sabio dijo que hay que ser brutal con las ideas y amable con las personas. Es esta una de las razones por las que considero importante no conocer, sino entender los sucesos que hoy nos hacen quienes somos. Los invito a que nos detengamos a observar esos detalles que hacen que la historia no solo sea un cuento de héroes y villanos, sino una 1 novela en la que hay personajes redondos con trasfondo, en la que hechos históricos acontecen y hasta el día hoy, influyen en nuestras vidas.
Sin nada más que agregar, iniciemos entonces.
Para comenzar, es interesante analizar que los Mexicas (fundadores de Tenochtitlán) fueron predecesores Aztecas (provenientes de Aztlán). Se sabe que estos emigraron porque así se los ordenó su Dios, dando la orden de asentarse en donde encontrasen a la famosa águila parada sobre un nopal.
El trasfondo esconde que los Aztecas habían sido hostigados y obligados a pagar tributos hacia la cultura líder de la zona en la que residían. Ocurre algo muy parecido con aquella historia bíblica en la que Moisés libera a los israelitas de Egipto, seguido por 40 años de deambular por el desierto.
Considero que esta cultura, después de tanto tiempo de vagar (se cree que fueron 210 años), llega al territorio prometido en el que se asientan y ven una oportunidad perfecta para echar raíces. Es una forma natural de actuar pues el encontrar por fin tu hogar, te hace no querer dejarlo nunca. Yo defendería mi hogar, mi gente y mis tradiciones, después de encontrar lo que por siglos estuve buscando.
"El poder tiende a corromper, el poder absoluto corrompe absolutamente." -Lord Acton
Sería muy soberbio de nuestra parte decir que sabemos cómo es que se siente el poder de gobernar un mundo. Sí, hemos ganado partidas de videojuegos, o tal vez hemos sido los encargados en un proyecto de la escuela, pero hablemos de gobernar un país con casi 2 millones de sin mencionar a sus respectivos habitantes.
Los Aztecas, mejor dicho, Mexicas, habían levantado el imperio más grande de Mesoamérica. Parece que habían invertido los papeles, pues se apropiaron de las deidades Km2 2 y conocimientos de los pueblos aledaños (entre ellos los Tlaxcaltecas, cultura muy importante en el futuro).
Aquella cultura que pidió a los Dioses salvación se había convertido en una amenaza que no pensaría dos veces en conquistar a los pueblos aledaños. ¿Se puede ver como una especie de venganza?. Al haber sido hostigado, lo que haré, ahora que tengo poder, ¿es hostigar con mi gobernanza?
Como dato extra, sabemos que, dentro de la tradición Mexica, estaba la de ofrecer sacrificios humanos y la antropofagia. Las culturas aledañas estaban obligadas a ofrecer sus tributos para que estos murieran degollados o abiertos en canal. Esta parte me deja en jaque. No pude dejar de lado la veneración tan grande que tenían los pueblos por sus dioses y, en mi cabeza resuena la idea de que tal vez esto era todo lo contrario a un castigo, sino una forma honrada de morir pues ofrecías tu cuerpo y alma hacia quienes debías todo. Así que esta parte la dejo a consideración del lector.
Lo que es un hecho, es que “las aledañas” tenían que estar pagando y ofreciendo de lo suyo, aunque a veces no tenían que dar. Se cree que cada 80 días, se entregaban collares, plumas, pieles, alimento, trajes de guerreros, escudos. En el Templo Mayor se han encontrado desde estrellas marinas, conchas, peces y hasta cocodrilos provenientes de la zona tropical. Entiendo por completo la razón de que tales, al ver un destello de esperanza para liberarse del yugo Mexica, tomaran la decisión de apoyar a aquellos visitantes españoles. El gran descontento sumado a la llegada de lo que parecían dioses, dio como producto, una guerra de dos mundos completamente distintos pero dispuestos a destruirse el uno al otro.
Situémonos en San Juan de Ulúa, “donde el gran hombre Dios Quetzalcóatl, alguna vez partió hacia el oriente”. Era bien sabido por el Tlatoani Moctezuma II, quien dirigía al imperio en ese entonces, que pronto, su Dios regresaría para tomar su puesto y 3 gobernar el gran reino Mexica. (Sumando la manifestación de los “presagios funestos”, se venía algo grande). Teniendo este contexto, nos cambiamos de bando y vemos a un Cortés apresurado por el descontento de Diego Velázquez (gobernador de Cuba) cuyo ejército apenas rebasa los 600 hombres. Este cuenta con 10 cañones, 4 falconetes y 13 arcabuces. Más adelante, analizaremos el papel de las armas y consigo, la gran brecha tecnológica entre ambos mundos para así saber si este armamento hizo la diferencia en la contienda.
Es febrero de 1519 y lo que parece ser una embarcación de Dioses, arriba a las costas Yucatecas donde se produce el primer contacto no entre Mexicas como tal, sino con los Mayas (una de las pocas culturas que no fue conquistada por los habitantes de Tenochtitlán). Después de acumular victorias españolas, parten a Veracruz cuál candidato a la presidencia, Cortés se hizo conocer por todo el país. Los Mexicas cada vez se ponían más nerviosos pues la personificación de su fin había llegado.
Me atrevo a decir que Cortés fue un hombre que supo combinar la astucia y la suerte, pues se topó con pueblos que, a pesar de oponer resistencia en su momento, estuvieron dispuestos en unirse a la contienda española. Y es aquí donde una de las más fuertes aseveraciones es mencionada; “La guerra de conquista fue una lucha entre pueblos originarios con las armas españolas”. A pesar de que esto pueda molestar a cualquiera, en este escrito se buscan encontrar los puntos frágiles para cicatrizarlos y reforzarlos pues, el individuo más fuerte es quien conoce sus debilidades y se esfuerza en atenderlas. Sin embargo, se comprende el descontento que esta frase pueda generar. Cortés ofreció libertad a cambio de lealtad a la corona y a la religión.
Tanto el pueblo Totonaca como los llamados Tlaxcaltecas se unieron a la contienda volviendo así, un ejército de poco más de 600 hombres, en un ejército de miles de ellos. Con la ayuda de lo que unos llaman destino, otro azar, es como una expedición con aires de conquista, se convirtió en la chispa que encendió una rebelión en un país entero.
“La guerra no es más que un asesinato en masa, y el asesinato no es progreso” -Alphonse de Lamartine
Dentro de los primeros errores gigantescos que quedaron marcados en México, está la Matanza de Cholula. No se le llama guerra ni batalla pues es un genocidio en el que tanto españoles como Tlaxcaltecas, arrasaron contra mujeres y niños. Me molesta bastante que la vida de estas personas haya sido decidida solo por las presunciones de un caudillo … Niños y mujeres murieron porque se creía planeaban una emboscada contra el ejército español. ¿Qué clase de individuo mata a seres tan indefensos?. Me pongo a pensar en la brutalidad del ser humano y me asusta que dentro de cada uno nosotros, exista esa capacidad para hacer algo tan vil e infame. Tan solo recordemos los campos de concentración nazi…
Estos son la clase de sucesos de los que tenemos que aprender mucho más pues cientos de vidas fueron tomadas para que México se convirtiese en lo que es hoy. Es tal por lo que debemos respeto y buen trato a cada una de estas culturas, pues una especie globalización mordaz cambió todas sus acepciones.
Está claro que el bando español no solo contaba con sangre europea. Una pregunta que resuena en mi cabeza es la de sí acaso ¿los pueblos que apoyaron a los españoles son considerados como traicioneros por entregar el país?. No considero que hayan cometido traición o que hayan entregado el país. Este proceso de reformación, cambio y mezcla iba a suceder tarde o temprano pues los pueblos aledaños ya estaban cansados de las injusticias Mexicas (tarde o temprano se 5 levantarían). Aunado a esto, la exploración del mundo no era una actividad propia de los españoles. Y sí, con esto doy a entender que tarde o temprano, otra nación pudo haber conquistado Tenochtitlán, pero de lo que estoy seguro, y me duele reconocer, es que los “errores” que se cometieron, no pudieron ser muy diferentes. (Sé que son atrocidades, pero no las considero errores porque de serlo estaríamos construidos bajo una base de estos. ¿Seríamos un error entonces?. No tenemos forma de ver qué hubiera pasado si no hubiese sucedido tal o cual cosa, mucho menos si hubiese sido para bien o para mal por lo que podemos creer que vivimos en la mejor versión posible).
En mi opinión, dos sucesos estaban destinados a acaecer: La unión de los pueblos aledaños para destituir al Mexica y, el descubrimiento e intento de conquista hacia Tenochtitlán, por parte de algún país europeo; tal vez Francia, Reino Unido, Portugal… Aunando la idea principal, considero que no se le puede llamar traición a un movimiento cuyo fin se centraba en fijar condiciones justas para los pueblos, oportunidades de crecimiento igualitarias, una organización de poder más equilibrada… Sin embargo, es nuevamente la incertidumbre del futuro la que hace ver a estos pueblos de tal manera pues ninguno de estos se imaginaría lo que sucedería después. Apoyaron un movimiento sin ver las dos caras de la moneda, un error que los costaría su poca libertad, una decisión tomada por miedo a los caballeros con petos de hierro, una inocencia inconsciente.
También me pregunto qué hubiera pasado si la lucha hubiese sucedido solo entre pueblos del mismo país. Qué tan factible pudiese haber sido una revolución sin intervención española. Algo parecido a la revolución de 1910 (lo que me recuerda a personajes como Victoriano Huerta, Félix Díaz o sucesos tan injustos como la “decena trágica”). Tal vez y a pesar de que no me agrade esto, el hecho de que México fuese gobernado por un ente externo, ayudó al país para progresar. No estoy diciendo que fue 6 bueno ni que fue lo mejor que pudo haber pasado, pero fue lo que sucedió, las cosas se dieron como se dieron, sean o no atrocidades, el presente se construyó gracias al pasado. La viruela, que no discernió entre aliados ni Mexicas, asesinó a millones reduciendo la población hasta en un 88% y no podemos decir que fue un error porque a pesar de las lamentables muertes, se generaron defensas al igual que no podemos saber qué hubiese pasado con o sin la presencia de este patógeno. Tampoco voy a negar el aprovechamiento de los españoles frente a un México en construcción, es triste de tan solo imaginar, es un suceso en el que la realidad supera la ficción. La contienda deja al país hecho pedazos y es ahí donde se suscita la evangelización de los pueblos, la ocupación de la tierra por parte de conquistadores y colonos, la reducción a la servidumbre de numerosos aborígenes (más que nada por la viruela) y la infaltable esclavitud.
“Las armas son instrumentos de mala suerte emplearlas por mucho tiempo producirá calamidades”. -Sun Tzu
Falconetes, cañones, armaduras de metal, embarcaciones, espadas… Las armas utilizadas en la lucha de conquista es un tema de contraste porque, por un lado, estaban las macanas con filos de obsidiana, las ondas, petos de algodón y por el otro estaban las ballestas, los petos de metal y las espadas. Si hablásemos de una comparación justa, las armas españolas lo tienen ganado pues su tecnología está muy por encima de la de los mexicas, pero aún y con esas armas, el ejército español casi pierde por completo (Noche Triste), tardó en tomar la capital y tuvo diversas bajas. 7 Hay dos escenarios que me gustaría analizar: la lucha en tierra y la lucha tanto en bergantines como en canoas.
En la primera tenemos la presencia de cañones, de arcabuces y de espadas. El problema era que los arcabuces eran muy lentos por cada recarga más aparte, se tiene el riesgo de qué la carga explote antes de ser disparada por lo que para recargar dos veces necesitaba de mucho tiempo y de concentración, algo impensable en una lucha. Los cañones al igual que los arcabuces eran sumamente lentos. Cada carga tenía que ser lanzada de forma estratégica entonces, imagino que apuntar habrá sido complicadísimo y no dudo que el ejército Mexica haya desarrollado técnicas para esquivar estos disparos. Y, por último, lo que creo que hace la mayor diferencia, es la espalda, la cual es mucho más segura, duradera y fácil de maniobrar a comparación del garrote. En el segundo escenario en el que diversas embarcaciones se enfrentan en la laguna, considero que los arcabuces no son los indicados y reitero la importancia que tuvo la espada y nada más. Se concluye pues, que las armas no pusieron en desventaja a los Mexicas, fue la cantidad de personas que se integraron en la lucha, lo que hizo la diferencia pues las armas eran lentas.
Para terminar, simplemente me gustaría que se supiese que mi bando no es el de aquellos Mexicas guerreros que lucharon hasta el fin, con valentía y honor, aquellos que tuvieron Tlatoanis como Moctezuma o Cuauhtémoc que llevaron la contienda como verdaderos líderes, aquel pueblo que a pesar de dominar con mano dura, supo mantener su régimen a raya. Tampoco estoy del lado europeo, con aquellos comandantes tan osados, capaces de todo por saciar su sed de curiosidad y descubrimiento, por aquellos miles de soldados que fueron fieles y lucharon en el nombre de su preciada corona, con aquel pequeño ejército que nunca se rindió hasta lograr su cometido… 8 La historia no es como querríamos que fuese, pero sí como debería ser. La conquista seguirá siendo un suceso duro de procesar, pero es como tendría ser. México es un país con muchos problemas que resolver, pero, a decir verdad, considero que así es como debía ser, porque deja la tutela a personas como nosotros para recordarnos que tanto esfuerzo, sudor, sangre y honra nos respaldan y que nos toca a nosotros generar una nueva revolución, con un camino difícil, pero con nada que no podamos enfrentar con la valentía de los Mexicas y con la osadía de los europeos.
Considero que la cultura española merece su debido crédito y por nada del mundo, merece culpa o castigo de nuestra parte. Los errores que se cometieron no representan a ninguno de sus ciudadanos y es por esa misma razón que me enorgullezco no de los héroes ni de los villanos sino de la gran historia que me respalda no solo a mí, sino también a todo aquel con un espíritu mexicano. No está de más decir que México es la mezcla de las culturas nativas y española. A su vez, y como ya lo mencioné, todos aquellos pueblos originarios que aún persisten en nuestro país merecen respeto y un trato igualitario pues además de ser ciudadanos de este país, son parte de nuestra historia.
Agradezco a grandes autores como Bernal Díaz del Castillo (Historia Verdadera De La Conquista De La Nueva España), analistas como el Dr. Eduardo Matos y el Dr. Antonio Rubial García, arqueólogos, investigadores, periodistas y científicos que me han facilitado las herramientas para llevar a cabo esta investigación.
Jorge Marmolejo Zárate es un estudiante de preparatoria con 16 años de edad al que le apasiona el baloncesto y la música. Ha tenido la experiencia de participar en el Torneo Nacional de Debate organizado por el INE, al igual que el modelo de Naciones Unidas organizado por el Naymun.
Considera que el desarrollar la capacidad de expresar tus ideas con bases y argumentos, nos convierte en individuos conscientes y capaces de generar un cambio allá fuera.
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