Por Juan Francisco Castañeda Pablo y Marlon Pulido Camacho.
Coordina Román Sánchez Marmolejo
“Siempre se la pasaban haciendo censos para diferentes cosas y rara vez llegaba la ayuda.”
Desde hace ya mucho tiempo las condiciones políticas y sociales en Venezuela no han sido muy favorables, en ese sentido consideramos importante visibilizar esta inestabilidad desde la vivencia de un grupo prioritario, o en este caso, un grupo rezagado, las personas con discapacidad. Analizarlo desde el apoyo por parte del gobierno, la percepción ciudadana y la infraestructura nos da una radiografía sobre la vivencia de la discapacidad en un país como Venezuela.
Según el testimonio de “Quintana”, una activista venezolana con discapacidad, el gobierno apoya con “la bolsa”, una despensa con harina, arroz entre otros productos que se vende a bajo costo; este apoyo llega cada mes o cada 2-3 meses, y en ocasiones llega incompleta ya que en el proceso de su distribución se sustraen los productos mas valiosos como el aceite. Los productos no son de muy buena calidad, ya que conoce gente que ha sufrido intoxicaciones, porque se deduce se adulteran los alimentos, y se llegan a ver animalitos en los mismos.
“La bolsa que llega cada cierto tiempo las personas con discapacidad, tienen ciertos beneficios te pueden vender dos bolsas en lugares donde hay personas con discapacidad pues no cancelan la bolsa te llega gratuita”.
Además, existe el apoyo José Gregorio Hernández para las personas con discapacidad; este apoyo consta de 162 bolívares o 4,47 bolívares, según la tasa de cambio oficial del Banco Central de Venezuela (BCV) (El Caribe, 2024)
Quintana menciona que, si bien se aplican muchos censos, en su caso tuvo que tocar puertas para acceder a apoyos, y ha escuchado que en la capital y en las grandes ciudades hay más oportunidades.
“He escuchado algunos casos donde si han recibido ayuda del gobierno tocando algunas puertas, pero con palanca”.
En materia de infraestructura incluyente existen mínimos intentos, situación que complica la vida de este sector social.
“Calles dañadas, solo algunas partes están más pasables”.
Respecto al trato por parte de la ciudadania existen coincidencias con el actuar mexicano, una visión capacitista, que subestima a las personas con discapacidad.
“Muchas personas suelen subestimar, por la forma en que te ven”.
La realidad es desoladora, ya que los apoyos coinciden con las deficiencias en la politica pública de Venezuela, por eso, invitamos a no dejar atrás ni olvidar a las personas con discapacidad como parte de la lucha por la justicia social.
Fuentes:
Testimonio de activista “Quintana”
Sobre los autores:
Juan Francisco Castañeda Pablo es pasante en Ciencias Políticas, e integrante de la Unidad de Divulgación de los Derechos de las Personas con Discapacidad de la Comisión Municipal de Derechos Humanos de Tepic.
Marlon Pulido Camacho es abogado con especialidad en criminología, activista de la discapacidad, creador de contenido e integrante de la Unidad de Divulgación de los Derechos de las Personas con Discapacidad de la Comisión Municipal de Derechos Humanos de Tepic.
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